CORTE DE UÑAS
Hoy nos toca hablar de cómo cortarle las uñas a nuestras
mascotas. Mucha gente piensa que las uñas se pueden cortar de cualquier manera
y por cualquier parte, pero no pueden estar más equivocados…
Los animales, por dentro de sus “garras” tienen una vena que
va creciendo a medida que crece la uña también. A la hora de cortar debemos
tener en cuenta que no debemos sobrepasar esa vena, o instantáneamente comenzara
a sangrar y obviamente, le haremos daño
al animal… Cuando esto ocurra, la sangre será muy escandalosa a pesar de ser
solo una uña, y deberemos ponerle un producto llamado “cortahemorragias” , ya
sea en polvo o en spray, y la sangre se cortara al momento.
Conforme vamos cortando la uña, esa vena se va retrayendo,
de manera que poco a poco podremos ir cortando cada vez más.
Cuando las uñitas son blancas, la vena se ve a través de
ella y podemos más o menos calcular por donde cortar; pero si las uñas son
negras, la cosa ya es más complicada porque no podemos ver por dónde va la vena
y podemos pasarnos al cortar y hacer que sangre… Por eso esta tarea se
convierte en algo un poco más complicado, y si no estás seguro de saber hacerlo
bien, siempre es mejor llevarla a que lo haga un profesional, bien sea una
peluquera canina o un veterinario.
También se debe tener en cuenta, aunque es menos importante,
la dirección en la que se hace el corte, ya que si lo hacemos en una mala dirección
es posible que al animal le resulte incomodo al apoyar su patita para caminar,
pero en ninguna manera resulta peligroso.
Para que lo entendamos mejor, aquí tenemos un gráfico que lo
muestra muy claramente…
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PEINES Y CEPILLOS
Cardas: La carda es apropiada para perros, gatos
y otros animales pequeños. Proporciona un cuidado agradable del pelaje para la
mascota y cómoda para el dueño. Además, impide la formación de nudos en el
pelo. Es fácil de utilizar y especialmente apropiada para animales con pelos
lanosos. Existen cardas sin proteger y
cardas protegidas (con bolitas en las puntas); estas últimas se usan en
perritos que tienen la piel clarita, y de esta manera evitaremos en cierta
manera que se le irrite.
Cepillo púas
metálicas (de mantequilla): El cepillo de mantequilla es el peine adecuado para el aseo diario de
perros de pelo largo, como el Yorkshire Terrier, que tiene un pelaje similar al
pelo humano, por lo que es más delicado. NUNCA lleva bolitas en la punta de las
púas. No arrancan el pelo, está preparado para que las púas salten antes de
hacerlo, luego se incorporan a la base muy fácilmente. Los hay redondos,
rectangulares y ovales.
Cepillo de cerdas
naturales: El cepillo
de cerdas naturales es un cepillo para acicalar únicamente, no se puede
utilizar para aceitar, pues se estropearía rápidamente, ni para desenredar, ya
que sus púas son blandas. Los pequeños se utilizan tanto para darle los
retoques al moño o para aplicar la gomina o el fijador en su caso, como para
llevarlos en el bolsillo a la hora de sacar un ejemplar en el ring.
Peine metálico: Imprescindible a la hora de
asegurarnos de que nuestra mascota está totalmente libre de nudos. Muy útil
sobre todo en razas de pelo largo. Además, nos servirá para ir “conduciendo” el
pelo mientras estamos haciendo un corte a tijera, y nos ayudará a la hora de
hacer los recogidos propios de ciertas razas. Sus púas tienen las puntas
redondeadas, para proteger la piel del animal.
Peine de púas
giratorias: Este peine
tiene la misma función que el peine metálico común, pero en este caso las púas
giran, por lo que el nudo va saliendo más fácilmente sin llegar a arrancar el
pelito de nuestra mascota.
Peine lagrimal: Las púas de este peine están muy
juntas entre ellas, por lo que es muy útil para limpiar la zona de alrededor de
los ojos, donde suele acumularse algo de suciedad debido al constante lagrimeo
del animal.
Cortanudos
(quitanudos): Este es
un peine con cuchillas curvas, perfecto para perros con nudos imposibles de
quitar con peine y cepillo. Con el cortanudos podemos penetrar en el nudo para
ir quitándolo poco a poco, hasta acabar con él por completo. Las cuchillas solo
cortarán la zona del nudo, evitando arrancar más pelo del necesario.
Peine de cola de ratón: El Peine de cola de ratón se usa
para peinar la zona de los ojos y lagrimales, para marcar la raya al hacer el
peinado, para coger paquetitos y colocar los lacitos a perritos que lo
necesiten, como los yorkies o los malteses. El extremo metálico permite separar
los mechones y conducir el cabello.
Furminator
(rastrillo metálico):
El Furminator elimina los pelos sueltos y reduce la caída del pelo de nuestro
perro o gato hasta en un 90%. Con Furminator cuidaremos la capa interior de
pelo de nuestra mascota, sin dañar la superior. El resultado tras un uso
regular es un manto sano y brillante.
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EL BAÑO EN MASCOTAS
A pesar de estas “opiniones no infundadas”, cualquier peluquero canino sabe que un baño bien realizado es saludable para nuestra mascota, ya que es la forma más eficaz de eliminar cualquier parásito que tenga tu mascota, además de darle un perfume más adecuado para estar dentro de una casa.
Lo primero que debemos hacer incluso antes de comenzar el baño es cepillar muy bien a nuestra mascota, hasta asegurarnos de que no le quede ni un solo nudo; el baño no los eliminará, sino que los hará mucho más compactos y difíciles de eliminar. Además, a la hora del secado, el interior del nudo quedará húmedo, de manera que podrá provocar la aparición de hongos o incluso de una dermatitis peligrosa para la salud de nuestro pequeño amigo.
Ahora sí estamos preparados para el baño. Meteremos a nuestra mascota en la bañera y mojaremos bien su pelaje. Seguidamente, echaremos el champú (siempre especializado para mascotas, y adecuado a su tipo de pelo) en nuestra mano y lo aplicaremos sobre todo su cuerpo. (Consejo: La cabeza debe ser lo último que enjabonemos y lo primero que enjuaguemos, ya que de esta manera evitaremos que el champú pueda irritarle los ojos)
Cuando ya tengamos al perrito totalmente enjabonado, debemos enjuagarlo bien con agua tibia hasta asegurarnos de que no queda nada de champú, ya que de otra forma el pelo no quedará del todo limpio. Si nuestra mascota tiene el pelo largo, echaremos un poco de mascarilla en nuestras manos, la esparciremos bien por su pelaje y enjuagaremos; esto hará que el tacto sea mucho más sedoso, además de ayudar a la hora de quitar los pocos nudos que puedan haberse hecho en el enjabonado.
Por último, ya solo nos queda el secado. Sacaremos al animal de la bañera y lo enrrollaremos en una toalla seca; nunca intentaremos secar restregando en el pelo, pues lo único que conseguiremos es hacer más nudos. La función de la toalla será solo quitar el exceso de agua; la tarea de secar la acabaremos con el secador, ayudándonos a la vez con el cepillado. Lo que menos les gusta es el secador en la carita, así que esto será lo último, pero no por esto le prestaremos menos atención.
El resultado es una mascota con buen olor, libre de parásitos y con su pelaje sin nudos y con un brillo excepcional. Y recalquemos que con el baño NUNCA haremos daño a su salud. 